Removiendo Mitos - Freddy Pérez
La ley de la Compensación - Ralph Waldo Emerson (1941) –Lección 5.
Némesis vive
La circunstancia niveladora me alcanzará…
Un tercer elemento sorpresa es que previo a esta observación de Waldo (1941), Hazen (1934) introdujo la noción de servomecanismo como un dispositivo de mando y regulación que corrige automáticamente el valor de una variable para que se mantenga en el valor deseado…
Los servomecanismos controlan automáticamente el funcionamiento de una instalación y ocupan un lugar importante en la industria, autores como Atlan, Haken y Maturana (2003) comparten el punto de vista de Bertalanffy (1941) y Hazen (1934)…en el área de las ciencias sociales autores como Edward Ross (1930) Talcott Parsons (1902-1979) Robert Merton (1910-2003) Mario Bunge (1919) y Stafford Beer (1926-2002) entre otros, reconocen que los sistemas sociales tienen la capacidad de reservarse el uso de estos mecanismos para mantener su existencia ante estados de perturbación o inestabilidad. En concreto, la idea de Waldo de asimilar el mundo “mi vida” al funcionamiento de un sistema abierto, no es descabellada… El mundo, la vida, o el universo como prefieran denominarlo se reserva sus propios mecanismos de ajuste y control…
Celebro reconocer que esta idea no es nada nueva. Un paseo rápido al mundo griego nos reconcilia con Némesis, la diosa de la justicia retributiva, la solidaridad, la venganza, el equilibrio y la fortuna. Némesis sancionaba a los que no obedecían a las personas con derecho a mandarlas, y sobre todo, a los hijos que no obedecían a sus padres, a los que metían la mano en el tesoro público, a los que cometían atropellos de todo género.
En resumen, estamos juntos y revueltos más no fuera del control de la Ley de la Compensación, es lo que quiso decir Waldo… “No podéis hacer el mal sin padecerlo… Tratad a los hombres como si fuesen peones de ajedrez, o bolos con que se juega, y sufriréis tanto como ellos. Si pretendéis ignorar su corazón, perderéis el vuestro”… No olvidaré el maltrato, la traición y la mentira con la que tratasteis a las personas que alguna vez te ayudaron o te quisieron, dice Némesis, mientras entona el himno de la alegría… El proverbio vulgar: “Si no lo cobro de su bolsa, lo cobraré de su piel”, es hondamente filosófico”. Waldo (1841:9)
Y yo agrego, más tarde, o más temprano una circunstancia niveladora me alcanzará y me pondrá en el lugar que me corresponde según mis ideas y acciones…De eso sabe mucho La Ley de Atracción…
Cerraré este articulo con un ¡Viva por la vida y todas las cosas buenas que podemos proporcionarnos!…